El hotel es precioso, con vistas mágicas desde mi habitación y la oportunidad de hacer kite surfing justo al lado. Me encantó la experiencia de nadar con delfines, fue inolvidable.

me sentí muy a gusto, no me puedo quejar

Nuestra estancia fue realmente placentera. Las instalaciones estaban diseñadas con atención a los detalles, y la accesibilidad era excelente, algo fundamental para nosotros como huéspedes con discapacidad. El acceso a la playa y las piscinas se facilitó con rampas y caminos amplios, lo que nos permitió disfrutar de la belleza natural sin preocupaciones. El personal, especialmente Mr Bhugoo, hizo todo lo posible para hacernos sentir cómodos y bienvenidos. Además, las vistas desde el complejo eran impactantes, con jardines hermosos que solían alegrar nuestros días.

El proceso para reservar restaurantes era algo complicado y requería hacer las reservas con varios días de antelación.

El rincón escondido del paraíso

El hotel te envuelve desde el primer momento, con un personal siempre sonriendo y la playa justo frente a tu habitación. ¡Las puestas de sol son simplemente inolvidables!

Sin embargo, los precios en los restaurantes son un poco altos y la variedad del buffet podría mejorar. Reservar con antelación para cenar puede ser tedioso.

Increíbles vistas desde el balcón.

excelente acceso a playas y puntos de interés

Durante mi estancia, disfruté de la increíble playa pública a solo 10 minutos a pie, lo que facilitó mis paseos matutinos mientras exploraba los alrededores, y la cercanía a la famosa Cascada Submarina, una atracción extraordinaria que no te puedes perder. además, el personal fue excepcional, encargado de que cada momento fuera especial.

Este lugar me queda perfecto. Siempre disfruto de la piscina climatizada, el acceso a la playa y el servicio a la habitación. En mi primera visita, el personal me ayudó con una picadura de insecto, lo recordaré siempre. ¡Volveré un fin de semana!

Disfrutamos de actividades acuáticas increíbles, como el kite surfing en una de las mejores playas del mundo, justo frente al hotel. Además, el personal fue excepcional, cuidando de mis hijos y haciendo que todos nos sintiéramos especiales. Me encantó el trato de la concierge, que nos hizo sentir únicos.

A mis hijos les habría encantado más variedad en las cenas, ya que la selección del buffet era limitada y se repetía mucho.

experiencia mágica en la playa con mensajeros de amor

Desde el primer momento en LUX Le Morne, nos hicieron sentir como en casa. La atención del personal fue excepcional y cada uno sonreía genuinamente. La comida era fantástica, con desayunos variados que nos llenaban de energía para disfrutar del hermoso entorno. La playa era un paraíso, con aguas cristalinas y un ambiente relajante. ¡Incluso prepararon un mensaje especial en la arena para nosotros! Todo lo que uno podría desear en unas vacaciones de ensueño. No puedo esperar para regresar y repetir esta experiencia inolvidable.

El hotel es realmente impresionante, con una ubicación privilegiada frente a una playa espectacular. Las instalaciones están magníficamente cuidadas, con jardines que parecen de ensueño. La habitación, una Junior Suite con vista al océano, era muy bonita y estaba bien equipada. La cama era cómoda y la vista desde el balcón era un placer cada mañana. El personal fue extremadamente amable, siempre dispuesto a ayudar. Sin embargo, el bufet de la cena me pareció algo limitado, con pocas opciones sanas y muchas repeticiones. Las reservas de los restaurantes tenían que hacerse con anticipación, lo que puede ser un poco engorroso si no tienes planes claros. A mis hijos les habría encantado más variedad en las cenas, ya que la selección era un poco monótona. Aun así, la experiencia global fue muy placentera y disfrutamos de unas vacaciones memorables al lado del mar.

tranquilidad y atención al detalle

La naturaleza te envuelve, con aves cantando cada mañana y un ambiente sereno durante todo el día. El personal muestra un compromiso excepcional, atendiendo cada detalle de nuestra estancia y asegurándose de que tuviéramos una experiencia memorable.

El proceso de reservas para los restaurantes puede ser un poco engorroso.

La ubicación del hotel es realmente impresionante y el ambiente es muy tranquilo, perfecto para relajarse. Aunque el buffet de la cena podía ser más variado, el personal fue amable y atento. Las instalaciones estaban bien mantenidas, lo que contribuyó a una experiencia agradable.

Pasamos seis noches en lux y fue una experiencia increíble. La playa está a pocos pasos y es simplemente hermosa. El spa es un verdadero lujo, con sauna y sala de relajación que disfrutamos mucho. Además, el personal siempre estuvo atento a cada detalle, haciéndonos sentir especiales. La variedad en la comida fue también sorprendente, ¡pocas veces he comido tan bien!

lo recomiendo encarecidamente

El acceso a la playa es genial. La comida del buffet tenía opciones repetitivas.